sábado, marzo 19, 2011

Consume, corre, vive, consume, corre, vive...

Estoy en una ciudad a lo grande, todo aquí es desproporcionado, empezando por la cantidad de veces que la gente come al día ¿200? y terminando por la cantidad de coches, luces, publicidad ... enorme. No deja de ser paradójico encontrar carteles de "La hora de la tierra" por muchas partes, y a la vez verte rodeado de carteles luminosos gigantes, carteles publicitarios que ocupan un rascacielos entero, carreteras atestadas de coches a todas horas, contaminación... gente con mascarillas para no respirar tanta mierda, el río está muerto (verídico), centros comerciales para aburrir y numerosísimos pisos elevados donde la gente vive ... las denominadas "Colmenas". Así no me extraña que nos estemos cargando el mundo... a éste ritmo lo extraño es que no se haya terminado súbitamente ya.

Me aterra lo que somos, la raza humana no tiene límites a la hora de despilfarrar, de consumir, de crear/destruir... niños pidiendo dinero en los semáforos, señoras con su familiar ciego de la mano pidiendo dinero en la carretera... y después, tan solo unos metros más allá, super casas con muros elevados, seguridad, cochazos... qué asco me da... prácticamente el mismo que siento cuando ciertas personas hablan de su propio capital como auténticos tiburones, deseando siempre más... a la vez que después dicen "se te parte el alma cuando ves a los niños pidiendo"... qué hipocresía más absoluta... de verdad, a veces quisiera que todo esto terminara de una vez, por nuestro bien y, sobre todo, por el bien del resto de la existencia, que mira perpleja como nos hemos apoderado de TODO.

El próximo sábado, a las 20.30 (hora de Hong Kong), por favor, dejad de consumir electricidad durante una hora... solo eso... a pesar de los excépticos hagamos un pequeño esfuerzo en común.

Gracias por leer mis ilegibles frases.

1 comentario:

Margarita dijo...

un día el perro se sacudirá todas las pulgas de una vez ... y el mundo continuará